La historia podría contarse como uno de los innumerables cuentos de hadas que rondan el Etna. Una mezcla de norte y sur creada por el amor y una pasión común: tú, A ’Muntagna.
La primera vez que el norte se encontró con el sur quedó fascinado por una lengua de lava roja que dominaba el horizonte, por encima de las luces de Catania. Y de ahí un crescendo de rugidos, lapilli, humos y miles de colores y matices. Los libros para saber más, el trabajo que nos ha elegido desde hace varios años, la pasión por el volcán y por las personas que, inevitablemente, son secuestradas. Hay una figura del norte, apasionada, parlanchina, que cuenta su «experiencia al revés» y todo lo que no sabe sobre el significado de vivir al pie del volcán. Luego está el siciliano nativo, de Catania, colorido, folclórico, pero que tiene la profesionalidad y la precisión de un nórdico. Ambos comparten una misión: la necesidad de dar a conocer lugares, historias pero sobre todo apasionarse por este mundo aparte que se llama Etna.
Llegarás como visitante y te irás con un poco de sentido de pertenencia, un poco más de conocimiento y una nueva pasión: la nuestra.
De todo esto, y mucho más que te dejamos descubrir, nació Etnavic.